Te contamos sobre los cinco mejores paisajistas de nuestro país y por qué son quienes son. ¡Conócelos aquí!
Antes de comenzar debemos aclarar un tema importantísimo: ¿Qué es el paisajismo?
Más allá de un género pictórico, el paisajismo es la herramienta visual a través de la cual los pintores plasman la historia y la identidad de los lugares a través de la inmortalización de una geografía específica.
Existen paisajistas realistas y surrealistas, otros que se ubican mejor trazando líneas que reinventan los paisajes que sus ojos miran. El paisajismo cuenta historias interesantes y aproxima nuestros sentidos a las visiones de ciertos artistas. México, siendo un lugar tan prolífico en artistas, especialmente pictóricos, tiene una serie de paisajistas que han hecho trabajos muy interesantes.
José María Velasco.
No existe paisajista más representativo que Velasco. Especialmente cuando se trata de los paisajes que componían a esa Ciudad de México vacía, antes de que se convirtiera en la enorme urbe de la culturización de américa latina, y una de las más importantes del mundo. Velasco, alumno del gran Eugenio Landesio, pintaba desde el campo del Estado de México, y retrataba los rosados y azules del cielo tras las montañas que hoy componen al extinto Distrito Federal. Puedes encontrar la valiosísima y sensible obra de Velasco en el Palacio de Cultura Citibanamex, en el Centro Histórico de la CDMX, muy cerca de Pinceles y Más Mesones.
Dr. Atl.
De nombre Gerardo Murillo y habiendo compartido un hermoso amorío con Carmen Mondragón (mejor conocida como Nahu Ollin,
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Dr. Atl se caracterizaba por su arte simbólico, en donde su objeto de pasión eran los volcanes y sus infinitas posibilidades rocosas. Murillo estudió vulcanología en algún punto, es de ahí que nació su pasión por pintar volcanes y, habiendo tenido una relación tan estrecha con el tema, Dr. Atl utilizaba “colores atl”, una mezcla de resinas, aceites y óleos, que generaba los colores tan llamativos de la obra de este excelente pintor.
Paul Fischer.
Sí. Paul Fischer no es mexicano, sin embargo, ejerció aquí la práctica del paisajismo, observando detalles del paisaje y las identidades personales del país como casi nadie lo hizo. Fischer se lleva estrellas de oro porque dedicó su obra a zonas como Xochimilco y Cuautla que, bien a bien, son enormes representaciones de la mexicanidad, dejando a un lado los regionalismos.
Rufino Tamayo.
Disruptivo por excelencia, este señor de la pintura mexicana no solo tiene paisajismo en su obra, sin embargo, hoy nos enfocaremos en narrar un poco sobre su expedición hacia la identidad mexicana, que ampliamente se enfocó en el paisajismo y que, simbolizando a través del indigenismo y los paisajes rurales, se caracterizó por tener una visión revolucionaria y una técnica inigualable. Tamayo nunca exploró la pintura repitiendo técnicas, cosa que construye su estilo.
Luis Nishizawa.
Con sangre japonesa circundando por sus venas, este pintor tuvo la fortuna moverse entre realismo y expresionismo fácilmente y, así convertirse en uno de los grandes en México. Su obra sostiene un hermetismo muy peculiar y extranjero a las prácticas comunes de la técnica en México.
Conoce sobre estos y más pintores en el blog de Pinceles y Más.
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